Donación de la escultura "Constitución" de Emilio Gastón

El pasado 11 de febrero, Carmen Gascón, viuda de D. Emilio Gastón, hizo entrega de una de sus obras escultóricas a los estudiantes de la Facultad de Derecho. La obra lleva por título "Constitución" y Carmen Gascón ha querido que a los pies de la escultura figure un verso de Emilio Gastón: 

    "... exijo libertad

                  y pasaporte

                            de sueño

                                    y pensamiento".

 

 

 

 

Sobre la obra de Emilio Gastón, se escribió en el Heraldo de Arago?n. 7 de noviembre de 1996, el siguiente artículo:

ESCUELA DE ARTES: EMILIO GASTO?N

Conocemos a Emilio Gasto?n por facetas distintas de las que actualmente muestra en la Escuela. Se trata de una personalidad siempre activa en nuestro entorno cultural, aunque el vehi?culo con el que desarrolla su trabajo suele ser otro: las palabras. Creo que nadie desconoce las profundas conexiones que existen entre las diversas formas de expresar ideas a trave?s del arte, mucho ma?s en estos tiempos de fronteras que se diluyen o terminan por desaparecer. La importancia de una propuesta reside en la manera de conectar los niveles y elementos, desde los pre-iconogra?ficos a la intencio?n u?ltima del artista, en este caso. Aunque cada grupo de expresiones se organiza a partir de unos signos de naturaleza bien diferente y en concreto se atribuye a los arti?sticos principios como la ambigu?edad, autorreflexio?n, contextualidad, polisemia o liberacio?n de ciertos automatismos que, segu?n escribe Simo?n Marcha?n, los alejan del lenguaje hablado y escrito.

En su personal Manifiesto del hierro el propio Emilio Gasto?n explica una de las claves de su escultura: hay que olvidar el hierro como objeto para convertirlo en sujeto, transformarlo en actor. Efectivamente el acento se situ?a en el material que aparece tratado con el carin?o artesano de quien lo estima. La chapa recortada dibuja formas, con el adjetivo del o?xido, y vaci?os. Aqui? debemos recordar a nuestro Gargallo y sus ensen?anzas del espacio por contraste. Tambie?n son frecuentes los desechos que se reutilizan para crear una entidad nueva, como si ordenara un caos previo a la manera de Serrano. Los ejemplos aragoneses son, desde luego, imprescindibles si hablamos de escultura en esta tierra; sin embargo cabri?an otras referencias que entroncaran las obras con la vanguardia histo?rica y la visio?n que hoy tenemos de ella.

Respecto a los asuntos se observan campos tema?ticos muy amplios. Debe tenerse en cuenta la cantidad de piezas -quiere ofrecer un abanico de posibilidades bastante exhaustivo- y que algunas presentan dimensiones considerables (Insurreccio?n de la geometri?a). Sen?alaremos la alusio?n a Los poetas y sus tipologi?as complementarias, la naturaleza abstracta de una Margarita, las evocaciones tipo El juramento de los Fueros, la memoria infantil de Pinocho y los curiosos acercamientos a la figura antropomorfa como el Concejal. La poesi?a vive en el interior de todo el discurso y, en cierto modo, acompan?a al hierro en la cohesio?n del conjunto. Como muy bien concluye Emilio Gasto?n: Hay que hacer escultura tambie?n con la palabra, con la voz, infundir poesi?a a la materia.

Pedro Pablo Azpeitia